Actualidad en el Cuidado de la Salud
Vivimos en una época en la que el cuidado de la salud pasa a segundo término, donde preferimos mejor curar una enfermedad o tratar un síntoma que, prevenirlos, vivimos en un constante afán de perder peso rápidamente incurriendo en dietas depurativas, o bien la ingesta desmedida de productos milagro, , que analizadas detenidamente son más los riesgos a la salud que los beneficios, ya que no incluyen todos los nutrientes indispensables para el organismo, los cuales se requieren ingerir día a día, y por consiguiente lo mínimo que podemos esperar es una disminución en la cantidad de masa magra del cuerpo, lo que conlleva a una disminución de la efectividad del sistema inmune o bien, un grado de anemia por mencionar algunos, hablando acerca de los productos milagros, lo único seguro es que nos acarrearen un grado de hipertensión, por la cantidad alta de sodio que contiene, o bien siendo el caso de plantas medicinales, bien pudiese ocurrir envenenamiento por metales pesados o por efecto de la misma droga, ya que en el afán de realizar esta práctica no especulamos en la calidad y seguridad del producto, lo único que nos importa es los “beneficios” que se dice aporta, es tan ilógico pensar que si me tomo diariamente un batido de Herbalife, o bien 3 por día mas mi hora diaria de zumba, pero ingiriendo refresco, pan dulce en desayuno y cena, cero verduras en las comidas principales bajare de peso, a que si cuido la cantidad de porciones que ingiero en los 5 tiempos de comida, dejo de lado los azucares simples y las harinas refinadas, y hago quizás el zumba o 30 min de trote o running. No tendría buena salud. Por si fuera poco, el desenlace del sobrepeso y obesidad sin duda será la diabetes, y que pasa con ello, en primera no se acepta la enfermedad, en segunda se busca un culpable, un susto fue el desencadenante, pero no te pones a pensar que fue el proceso de al menos 10 años atrás donde disfrutabas comilona y tras comilonas, con tus 3 cocas por comida fuerte, con tun pan dulce para merendar, en segundo lugar el tratamiento nunca se lleva al pie de la letra, lo primero es no me tomo la metformina porque me causo mareo o me causo asco, si tengo insulina que es un buen tratamiento lo primero es dejarla porque si la uso quizá pierda la vista como mi abuela o bien termine con problemas en los riñones como el vecino, pero eso si la señora de la esquina te dice que te tomes la hierba de la víbora o los pelos de doña pancha hervidos con miel, y la consigues por cielo, mar y tierra para que te cures, sin importar que te cueste 100 o 1000 peso, , pero no se piensa en que el tratamiento ideal es el que te ofreció el médico, que además si tienes seguridad social no te costó ningún peso el tratamiento, y que solo lo reciben sin usarlo y que pasa con todo eso?, si el gasolinazo actual, tanto dinero mal usado y la gente más enferma, y todo el recurso vuelve a salir de los mismos impuestos que se pagan a diario. Lastimosamente vivimos en una época donde puede más la publicidad engañosa, donde la venta de esperanza es lo único que parece te queda, y el esfuerzo y años de estudio de los profesionales de la salud lo dejas a un lado. Y quieres acudir cuando ya no existe más remedio, para revertirlo o controlarlo.
No cabe duda que la actualidad en la que vivimos no es más que el reflejo de lo que esperamos como personas, donde vivimos con conformismos y vivimos de la mentira, y nunca nos esforzamos por realizar las acciones correctas para cuidar la salud, para nuestro propio bienestar.
Todo esto se puede revertir se come sano, si Elijes una dieta balanceada baja en grasas y carbohidratos simples, prefiera los lácteos descremados, las carnes magras, el huevo, cereales integrales, frutas y verduras.
Y es que una alimentación correcta sin apresurarse por bajar rápidamente de peso, es la opción para mantenerse en forma y saludable.
Pero los pequeños detalles cuentan de manera importante a la hora de hacer dietas, estos son algunos consejos para bajar o controlar el peso:
Ingiera sobre dos litros de agua al día.
Realice ejercicios por 30 minutos al día o al menos una hora por tres veces a la semana, no exigiéndose de sobremanera como dañarse algún ligamento.
Comer cada tres o cuatro horas. Las grandes horas de ayuno favorecen el aumento de peso.
Mantenga una alimentación balanceada, restringiendo las porciones diarias de alimentos y los alimentos ricos en grasas y azúcares. Utilice platos más pequeños para alimentarse.
Evite las bebidas alcohólicas ya que son ricas en carbohidratos. Si es por una ocasión especial o social opte por una ración moderada de vino espumante o cerveza no licores destilados.
Si le da hambre en la noche, en vez de comer un dulce prefiera algún alimento rico en proteínas como leche descremada, yogur, una rebanada de jamón de pavo, etc.
Realice las compras en el supermercado después de haber almorzado o haber comida una colación, nunca ir con hambre a realizar las compras y tratar de ir siempre con una lista para evitar comprar por impulso.
